EN POCAS PALABRAS
CCL
David Stuckler, científico
de la Universidad de Oxford (Inglaterra), publica un libro en el que denuncia
los efectos devastadores en la salud de los ciudadanos de las políticas de
austeridad.
El aumento de los suicidios y las enfermedades como la
depresión en los ciudadanos víctimas de las políticas de austeridad han hecho
saltar la alarma en la comunidad científica.
Los recortes podrían estar causando un daño irreparable
en la población más vulnerable a sus efectos. La proliferación de enfermedades
se ve agravada por la limitación del acceso a la atención sanitaria y al
consumo de medicamentos.
Así es como el investigador de la Universidad de
Oxford, David Stuckler, lo ha defendido en un libro
que publica junto al epidemiólogo estadounidense Sanjay
Basu, de la Universidad de Stanford. En él ambos
afirman que durante los últimos años, y a causa de lo que ellos llaman "la
gran recesión", se han producido más de 10.000 suicidios y alrededor de un
millón de casos de depresión en Europa y América del Norte.
En su obra incluso llegan a desvelar que la reducción
del presupuesto destinado a la prevención del sida en Grecia ha coincidido con
el aumento en un 200% de los casos de nuevas infecciones, que además
experimentó su primer brote de malaria en décadas.
"Los políticos deben tener en cuenta las graves
consecuencias sanitarias de sus decisiones económicas", ha afirmado Stuckler, quien asume que "la austeridad está teniendo
un efecto devastador". El científico de Oxford hace hincapié en su obra en
que este tipo de medidas austericidas son evitables,
incluso durante los peores desastres económicos, y ha destacado que el
empeoramiento de la salud de los ciudadanos es evitable y parte de una decisión
política.
*
Comunidad Canarias en Londres
No hay comentarios:
Publicar un comentario