No deja de ser un
aprieto el redactar este Prólogo.
Escribir del autor y de la obra, dar noticias de
ello, sin aminoraciones ni excesos,
distanciado de cualquier obligación que no sea la esencial de procurarle al lector referencias ecuánimes del volumen
que sigue y de quien lo alumbra, no, en
este caso, no resulta nada fácil. Y, sin embargo, he de intentarlo porque así me lo pide el Dr. Pérez González
¿Cómo presentar a alguien tan conocido como D. Francisco Pérez o decir
de él algo nuevo? No he de ocultar los
vínculos, profesionales y de amistad, que me ligan a nuestro personaje desde
hace muchos años.
Aún muy joven,
este lagunero cabal, simultanea los estudios de Bachillerato y luego los universitarios de Geografía e Historia con la
tinta fresca, los redobles comunicativos de la rotativa y el pausado
apresuramiento de las linotipias en "La Tarde" y "Hoja del
Lunes". Por razones de edad, había
llegado tarde a la Sección de Periodismo de la Universidad de Agüere y aún no era el tiempo de la Facultad de Ciencias
de la Información. De modo que D.
Francisco de Paula pertenece a esa generación de Periodistas del Archipiélago que trenzaron su primera formación
superior con saberes de Letras, no
estrictamente periodísticos, y mediante las vivencias, sazonadas e intensas, en
unas Redacciones, sacudidas, a la vez, por la herencia magnífica del antiguo
Periodismo tinerfeño y convulsionadas por una revolución tecnológica, que se anunciaba imparable y que
determinaría el ocaso de históricas cabeceras,
exhaustas de haber rendido muy abundantes y señalados servicios al país, y la
revitalización de otras, igualmente acreedoras al reconocimiento social. No fue
deficiente esa doble fragua para forjar informadores y comuni-cadores isleños, tan discretos como honrados a
macha martillo.
El periodista fue reclamado en la Casa de "El
Día" y de "Jornada Deportiva",
pronto hará 17 años, y donde ha desempeñado distintas funciones hasta acceder a la Secretaría General de la
Dirección en la que permanece en la actualidad.
Su cotidiano quehacer lo ha completado el Profesor
Francisco de Paula Pérez González con la inestimable colaboración que le
dispensó al Centro Internacional para las Ciencias de la Comunicación
(CICICOM), dentro del equipo ejecutivo de
éste, y con la investigación que dio lugar a la Tesis Doctoral que se recoge, en síntesis, en el presente
volumen, editado gracias a la sensibilidad del
Aula de Cultura del Cabildo Insular de Tenerife.
Por su condición de Periodista universitario, el
investigador, consciente de la dimensión
experimental de las Ciencias de la Información y la Comunicación, usa de la Prensa, no relegándola a fuentes auxiliares de
sus análisis, sino nucleándola, haciéndola
protagonista de los ecos suscitados por uno de los episodios del "Pleito Insular": el tendido del
cable telegráfico entre la Península
Ibérica y nuestro Archipiélago Atlántico. Finalmente, de Cádiz a Tenerife.
Esa disputa interinsular, renovada a cuenta de la
Capitalidad, de la ubicación de los Consulados, del tráfico marítimo... en el
pretérito, y resucitada por la división
provincial y por otros abundantes asuntos en el presente siglo, lleva a la convicción del historiador del Periodismo
que se trata de un fenómeno perenne,
enraizado en múltiples causas, y que tampoco erradica el voluntarismo político.
"El cable telegráfico Cádiz-Tenerife, la Prensa
y el Pleito Insular (1880-1884)", se inscribe
en la línea de investigación ya iniciada en el Departamento y en la Facultad de Ciencias de la Información de la
Universidad de La Laguna y significa una
aportación singular, muy valiosa, a la Historia de Canarias, que, acaso, sólo ha de superarse mediante un profundo conocimiento y la voluntad aunada de las nuevas
generaciones en aprestarse al destino común
de un pueblo y de un territorio peculiares.
En el deseo de que el libro que ahora tienen en sus manos, señores
lectores, ayude en la clarificación de las remoras que obstaculizan el
entendimiento político entre canarios,
felicitemos al Prof. Dr. Francisco de Paula Pérez González, por lo culminado y por cuanto ha de investigar aún, y
permítanme que me congratule de haber tenido la oportunidad de
ayudar al Periodista, docente e
investigador en las aulas y en las columnas de las hojas volanderas impresas, en aquello que, modestamente, haya
podido entrañar la dirección de la
Tesis.
ricardo acirón royo
Periodista
Catedrático de Periodismo de la
Universidad de La Laguna
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