Josefa Falcón Abreu
Amo la vida, sí, me parece
maravillosa, me gusta esta tierra en la que vivo, nuestro mundo, este mundo
algo maltrecho y cada día castigado pero bello, lleno de lugares hermosos, de
gente hermosa…Suelo decir que el mundo es patrimonio de la humanidad, esa
humanidad que lo habita y que no lo trata como debiera, que lo ensucia, lo
contamina, lo deteriora… Todos somos culpables de esto, unos más, otros menos, pero todos hemos tomado parte en esa ruina, nos
acostumbramos a lo cómodo, a no mirar si estaba bien o no lo que hacíamos, los
expertos nos alertaron pero las medidas se pusieron en práctica algo tarde,
cuando la herida ya era demasiado grande, nuestros mares van perdiendo la
pureza de sus aguas, la distintas especies de peces se extinguen, los fondos
marinos pierden encanto por nuestra culpa…Las ciudades se asfixian por la
contaminación ambiental, nuestros montes se queman con demasiada frecuencia y
se nos encoge el alma cuando esto ocurre, es de las cosas que más me impactan,
ver arder el monte y como el fuego acaba con su belleza en tan poco tiempo,
belleza que luego cuesta años recuperar para volver a ver ese monte de nuevo
verde y frondoso. Nosotros, los canarios, por desgracia sabemos mucho de
incendios forestales, raro es el año que no pasa esto en alguno de los montes
de nuestras islas y en nuestra mente aún tenemos los del último verano. Solemos
decir: “Este mundo loco…” y no, el mundo no es el loco, los locos somos quienes
lo habitamos y no lo cuidamos, pero aun no es tarde para salvar lo que queda,
que es mucho, es cuestión de concienciarnos, de preparar mejor a las
generaciones venideras para que ellas sean más justas de lo que hemos sido
nosotros, nuestro planeta se lo merece, un niño que llega al mundo también,
cuidemos el medio ambiente, aprendamos a reciclar, a no contaminar, a
aprovechar el agua… si lo hacemos todos juntos algo bueno tiene que
ocurrir…Buen día amigos.
Agosto
de 2013.
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