lunes, 25 de marzo de 2013

DOCUMENHTOS CANARIOS EN EL REGISTRO GENERAL DEL SELLO 1518-1525




INTRODUCCIÓN
Tras diez años de espera, impuestos por las dificultades económicas y técnicas del proyec­to, ve la luz la segunda parte de los Documentos Canarios en el Registro General del Se­lla Se trata, pues, de una continuación, con idénticos objetivos y características. Esto es, contribuir al conocimiento y difusión de las bases documentales de la Historia de Canarias, desde la perspectiva de los archivos generales de la Corona de Castilla. Para ello, se ha pasado revista a la sección "Registro General del Sello", del Archivo de Simancas, entre los años 1518 y 1525. De este modo, se completa el periodo considerado tradicionalmente como el de la for­mación de la nueva sociedad, correspondiente al proceso de colonización.
La confección de los extractos se ha hecho de modo que resulte innecesaria la consulta directa de los documentos, al recogerse en ellos todas las referencias relevantes: nombres, canti­dades, cargos, etc. En los pocos casos en que ello no ha sido posible, dada la complejidad o extensión del documento, se ha indicado mediante asterisco, para señalar el carácter meramen­te "introductorio" de la ficha. Dicho trabajo se acompaña, como en el primer volumen, con ín­dices de personas, materias y lugares, que permiten el fácil manejo de la documentación; y con otro de suscriptores, que posibilita una mejor fijación y dotación de los documentos.
En cuanto a los temas contenidos en el regesto, el principal bloque está constituido por asuntos administrativos. Ello es acorde con la naturaleza de la sección, integrada por provisio­nes reales. Dicho bloque puede dividirse en tres niveles, correspondientes a la Administración Central, a la Administración Local y al marco político general
En el primero de ellos podemos contemplar la labor jurisdiccional de los órganos centra­les, así como el envío al Archipiélago de pesquisidores y jueces de comisión o ejecución. Tal la­bor podría realizarse como resultado del trámite de alzada para los tribunales superiores, caso del Consejo Real o de la Audiencia, o a consecuencia de las reclamaciones contra las arbitra­riedades de las autoridades locales. En este último caso, los abusos denunciados abarcaban desde la denegación de viaje a la Corte para presentar quejas, lo que obligaba a la adminis­tración real a actuar para preservar el principio de legalidad; hasta el desmedido afán recau-[…]

No hay comentarios:

Publicar un comentario