DESMEMORIA HISTORICA DEL COLONIZADO CANARIO

            DESMEMORIA HISTÓRICA DEL COLONIZADO CANARIO

Eduardo Pedro García Rodríguez

En este momento actual, en que tanto el gobierno de la metrópoli como el supuestamente autonómico mal llamado canario  han abandonado casi totalmente los más elementales  principios de justicia social a favor del insaciable capitalismo, el cual en su voracidad ha creado una crisis ciertamente artificial con el fin de engullir los pocos derechos sociales que la clase trabajadora le había arrebatado mediante décadas de luchas en la que los trabajadores canarios han dejado infinidad de muertos, torturados, encarcelados y perseguidos por el solo hecho de pretender conseguir algo que poner dentro del pan, demás del agua que les permitía los explotadores coloniales y sus lacayos criollos.

Esta ofensiva capitalista colonial  nos la presentan arteramente por parte del sistema imperante como un mal necesario impuesto desde el gobierno de la metrópoli, y cuyas directrices son fielmente seguidas por sus testaferros en esta colonia tanto por los partidos sucursalitas como por los bien autodenominados nacionalistas, -y digo bien autodenominados porque realmente son nacionalistas, pero nacionalistas españoles-, quienes se han apresurado a seguir las reglas emanadas desde Madrid en la política de aplicación de los recortes en las prestaciones sociales en esta colonia, a lo que se ha unido los recortes en Cultura, no vendrá mal conocer el estado de la cuestión, en asuntos puntuales en que la propia desidia general aboca a la tendencia de convertir la historia, con mayúsculas, en puras y duras leyendas urbanas.

Metamorfosis  a las cuales no se puede asistir indiferente, y sin poner en valor la gran labor que de un tiempo a esta parte están desarrollando en Canarias diversos grupos matrioticos dedicados, a  la recuperación de la historia canaria, en todas sus facetas.

Recuperando la memoria histórica de nuestro pueblo podremos estar en condiciones de afrontar la crisis y volver a ser un país soberano. Revelando la verdad de lo que fuimos en los tiempos precoloniales.

La historia que se nos viene impartiendo desde arriba, nada de esto nos ha relatado, en el presente nos siguen presentando a Canarias como un  paraíso turístico y de folklore, con festejos interminables, bastión de recursos naturales y humanos.

Pretenden que entendamos qué el despojo es una forma legal cuando bien sabemos que es mecanismo para regularizar la situación extractora de recursos a favor de sus intereses como clase, defendidos además, por un sistema de ocupación militar. Sabemos bien que la represión es inherente para establecer un Estado déspota con una dictadura de partido que en la practica no ha dejado de existir.

Creemos sumamente importante rememorar la historia de nuestro pueblo en lucha, aquella donde el pasado es presente para construir el futuro, para no permitir que la matria continué bajo control de gobernadores testaferros coloniales, arrendatarios hosteleros, clubs de importadores y tiburones financieros.

Lo qué no quieren saber es qué luchamos contra el olvido y la represión, es decir, contra el sistema capitalista que impone un modo de vida que acaba con la vida misma, y contra un Estado liberal moderno qué impone violencia, desprecio, cárcel, tortura y muerte expresada en sus leyes, partidos e instituciones.

No necesitamos el beneplácito de gobiernos coloniales porque no son ellos los dueños de la tierra, los verdaderos dueños fueron nuestros ancestros, por eso conmatriotas debemos recuperarla y trabajarla y hacerla producir para el bien colectivo y la vamos a defender cueste lo que cueste.

Con estas premisas la alternativa Republicana Federal Canaria, Independiente,  Laica y Democrática dejará de ser una quimera y los ciudadanos canarios podremos ser, de una vez, dueños de nuestro destino, sin la tutela imperialista española.

Lo anteriormente expuesto viene a cuento en relación de uno de los mayores expolios que esta sufriendo en este principio del siglo XXI el sector mas empobrecido de los trabajadores canarios.

Últimamente un importante sector de la sociedad canaria esta convulsionada por la ola de deshumanizados desahucios que viene provocando la banca española establecida en esta colonia, que esta dejando a miles de familias en la calle y causando decenas de suicidios de ciudadanos desesperados al sentirse expoliados y desprotegidos frente a la voracidad capitalista colonial.

Todo ello a pesar de que la Constitución del país administrador de esta colonia recoge en su artículo 47 que: “Todos los españoles tienen derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada. Los poderes públicos promoverán las condiciones necesarias y establecerán las normas pertinentes para hacer efectivo este derecho, regulando la utilización del suelo de acuerdo con el interés general para impedir la especulación. La comunidad participará en las plusvalías que genere la acción urbanística de los entes públicos.” Este supuesto derecho en principio parece que solo afecta a los españoles y no a los ciudadanos de sus colonias, en todo caso, este artículo como otros muchos recogidos en ese papel no deja de ser un simple gesto de buenas intenciones tendentes a que la ciudadanía crea que se les ha dotado de algunos derechos, cuando la realidad es que han cambiado las formas para que en el fondo no cambiar nada, y a los hechos recogidos en la historia reciente nos remitimos.

Según publica el rotativo insular La Provincia de fecha  24 de julio de 2012 y que por su interés estadístico reproducimos: “…En el primer trimestre de 2012. En las Islas se han contabilizado en este periodo un total de 2.193 desalojos de viviendas y locales por incumplimientos en los pagos, según los datos del Consejo General del Poder Judicial y la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH). Esto es, 24 desahucios al día entre los meses de enero y marzo.

La estadística del Archipiélago destaca en un contexto general de aumento de los desalojos en todo el mapa español. Así, en este primer tramo de 2012 se cuentan 46.559 desalojos forzosos, registro "histórico" según informa la PAH, y que supone la ejecución de 517 desahucios al día. Por encima de Canarias se sitúan Cataluña (9.046), la Comunidad Valenciana (8.222), Madrid (7.248) y Andalucía (6.700), regiones todas con un índice notablemente mayor que el de las Islas.

El primer trimestre de 2012 se cerró con 18.424 lanzamientos judiciales, según los datos del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), de los que sólo 345 corresponderían a Canarias. En el Archipiélago también se sumaron 1.063 ejecuciones hipotecarias (el proceso iniciado para reclamar los pagos), cifra que sólo superan, de nuevo las comunidades autónomas de Valencia, Cataluña y Madrid.

“Estos datos desmienten las voces interesadas que decían que las ejecuciones estaban disminuyendo”, apuntó Colau. “Agradecemos”, continuó la coordinadora de la plataforma, “que por primera vez el CGPJ haya hecho públicos estos datos, pero exigimos que en nombre de la democracia y la transparencia no se nos oculten datos tan relevantes como son los cientos de miles de desalojos que se están perpetrando contra la población empobrecida por esta crisis que no es una crisis, sino a todas luces una gran estafa”.

Las estadísticas del CGPJ ponen de manifiesto que las ejecuciones hipotecarias se han acelerado también, hasta alcanzar 24.792 entre enero y marzo, la cifra más alta de los últimos dos años.

Las estadísticas judiciales ofrecen también datos sobre los procesos concúrsales que han sufrido las empresas, y que en el primer trimestre ascendieron a 2.541, la cifra más alta desde que se tiene registro de estas incidencias.

Los procesos de desahucio afectan a viviendas, y son solicitados en muchas ocasiones por las entidades financieras después de llevar a cabo una ejecución hipotecaria por el impago de la hipoteca. En otros casos, el mecanismo del desalojo se activa para resolver la falta de abono de los alquileres.” (A. Ojeda, 2012).

Ante estos desmanes del sistema colonial en Canarias, ciertos sectores de la población dotados de conciencia social han iniciado una serie de acciones destinadas a frenar los atropellos cometidos contra la ninguneada e históricamente explotada clase trabajadora canaria, promoviendo manifestaciones y actos de resistencia, para impedir el desahucio de las familias, en todas las islas, enfrentándose a las fuertes medidas de seguridad desplegadas por el sistema, ya que las viviendas a desalojar suelen estar literalmente tomadas por la Policía Nacional o Guardia Civil españolas e incluso por agentes  de la Policía Local.

Releyendo el libro de mi buen amigo conmatriota Paco Díaz, publicado en 1997  Genocidio Canario, encuentro un apartado dedicado precisamente a unos desahucios llevados a cabo en Las Palmas de Gran Canaria y que como prueba de que los desahucios masivos no son privativos de este siglo, y por su contenido profundamente humano no me resisto a reproducir en su totalidad:

“Cientos de familias de Las Palmas nunca pensaron verse atrapados en la miseria causada por la vorágine de estos 21 años de decaimiento constante de la economía canaria y ahora se han visto hundidos con el desahucio forzoso de sus viviendas, las cuales en su mayoría pertenecen al Patronato San José Artesano en cuya construcción y solares ayudó el Obispado.

Uno de los barrios más castigados es el barrio marginal de Lomo Blanco donde en pocos meses el Banco Hipotecario desahució a decenas de infelices familias, con la mayoría de sus miembros enfermos y analfabetos. Ante tal injusticia se movilizaron en su apoyo todos los vecinos del barrio en los primeros intentos, pero nuestras represivas autoridades no dudaron en enviar decenas de "geos" de antidisturbios para frenar a los vecinos que se habían hecho fuertes, pudiendo al fin expulsar de una vez a media docena de angustiadas familias. Entre estas familias estaba un señor mayor, Juanito al que echaron al principio, enfermo con cuatro hijos deficientes mentales, un anciano de 70 años, Santiaguito, muy enfermo y sin seguro alguno ni entradas económicas de ninguna clase, solo con la ayuda parroquial; otro anciano con una pequeña ayuda social por enfermedad, que murió durante este trasiego, con un hijo y su nuera, conocido por "Los Legionarios", los cuales echaron fuera los geos, cambiándole 1 cerradura y dejando dentro sus pertenencias. Los desahuciados en su locura y excitación prendieron fuego al piso. Poco después se reparó y comenzó a vivirlo la presidenta de la comunidad del bloque Dña. Pino? Junto con estas familias también fueron expulsados un matrimonio en paro y su hijo de tres años y doce miembros de la familia de D. Rafael Arellano González formada por tres generaciones.

Ante estos desahucios masivos brillaron por su ausencia las ayuda sociales y soluciones del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria la Viceconsejería de Vivienda del Gobierno de Canarias, los cuales han dilapidado más de 100.000 millones en nuevas viviendas sociales en lo últimos años, muchas de ellas costaron mas de 12 millones si añadimos L infraestructura anexa: jardines guarderías, etc. ¿Por qué no actuaron con rapidez, abonando ellos mismos deudas ridículas de menos de 100.000 ptas., adquiriéndolas al Banco Hipotecario, en sólo 200.000 ó 300.000 pesetas, en vez de los tiburones subasteros madrileños? ¿Tal vez porque estas viviendas no producen comisiones de las grandes constructora: peninsulares?

Sólo les echó una mano la Federación el Real de Las Palmas que contacte con el subastero y constructor madrileño, José Manuel Cabrera, a través del testaferro canario Abelino Bernal, buscando un aval de 3.000.000 por cada vivienda, pero a los "negociantes" les pareció poco y se “rajaron”.

Es necesario ahondar en el caso de la desahuciada -por sólo 152.000 ptas.- familia de D. Rafael Arellano González y comprobaremos claramente la mayoría de las denuncias que realizamos en este libro; para ello les entrevistamos en un humilde hostal donde se encuentran alojados por el Ayuntamiento.

El patriarca de esta docena de miembros, Sr. Arellano, tiene bajo sus espaldas el peso de una loza que le aplasta desde el comienzo de sus 59 años. Nacido en Alnuñécar, Granada, donde desde niño trabajaba en una humilde finca de su familia en el cultivo de papas, verduras, cereales, frutales y olivos. Era la época de la hambruna donde por más que se trabajara no daba siquiera para comprar los alimentos requisados: pan, tabaco, café, etc. Luego al alistarse en el ejército sirvió 10 años como paracaidista, desplazándose a Las Palmas con aquellas compañías de presumidos paracas que deslumhraron a las chicas canarias y la población los bautizó con el sobrenombre los brillantina. Fue cuando conoció y se enamoró de su actual esposa, Dña. Pino Ramos Quintana, ahora 53 años, casándose con ella y abandonando su profesión militar, quedando a vivir en nuestra, por entonces, floreciente ciudad.

El primer trabajo que consiguió fue limpiando cristales en Limpieza El Soli más tarde en "carga blanca" y de estibador. En 1977 se trasladó, dos años, con toda la familia a Barcelona, donde trabajaban varios familiares, empleándose como chófer, empezando a darle buena cultura a sus hijos, especialmente a su muy inteligente hija Ana, de 10 años, que estudiaba con su hermana que tenía un taller de alta costura con influyentes amistades.

Ahora nos recuerda con amargura el Sr. Arellano: "Como mi señora echaba de menos Canarias me decidí a regresar lo cual nunca he dejado de lamentarme, ya que esta decisión ha sido un cementerio para mi familia, puesto que por entonces Cataluña empezaba a potenciarse económicamente y comenzaba el decaimiento moral y económico de Canarias".

De vuelta en Canarias, comenzó con la profesión de carpintero que tenía mucho futuro, con el auge de la construcción, en un taller de carpintería de un siciliano y en el club Aldiana.

Con la competencia de la carpintería metálica le pararon, y ahora desde 1987, no cobra nada, después de agotar las prórrogas del paro y no tener suficiente cotización. “Muchos son los discursos de los políticos canarios para mejorar la situación”, nos dice, “pero luego, todo son agua de borrajas; ya que los últimos 20 años todo va cuesta abajo y destrozo sistemático del empleo, cuando antes todas las empresas ofrecían trabajo “Sin pausa alguna y como queriendo desahogarse continuó, “Vd. no se supone la angustia que me ha invadido durante los últimos años viendo la miseria en la que se ha visto envuelta mi familia, ya que me doy cuenta de la imposible salida a esta crisis, hasta tal punto que aunque soy una persona culta y que me gusta estar informado, no podía siquiera oír las noticias en la radio, ya que tuvimos seis meses cortada la luz y seis años sin agua, sólo la que tomábamos del jardín”.

Su hija Fea. Laura está casada con el desempleado José Manuel Betancort Salazar y tienen cuatro hijos que también vivían juntos. José Manuel obtuvo su primer trabajo a los 14 años en 1975, como botones del Hotel Faycan. Es una persona inteligente, elegantemente vestido de camarero, dentro de la sencillez de sus pantalones negros, camisa blanca y bien abetunados zapatos negros, listo para “currar” como extra, tan sólo 4 ó 5 horas, durante el fin de semana en una terraza del hundido Parque Santa Catalina, otrora floreciente y famoso “Catalina Park”.

Nos atendió amablemente con sus buenos reflejos y simpatía isletera y fácil verbo “Soy esclavo de la mala situación de Las Palmas capital, mientras crean nuevas urbanizaciones turísticas, cada vez más lejos de donde residen los parados, con el cuento de “crear puestos de trabajo”, que luego ofrecen a trabajadores foráneos y a extranjeros, no sólo europeos, sino inclusive sin preparación, como los marroquíes”. Continuó explicando el problema de la vivienda:

“El pueblo bajo no lee los periódicos ni mucho menos los boletines de la provincia, por eso perdimos la vivienda, ya que como mi suegra es analfabeta y le preguntó a mi hijo de 9 años qué era lo que decía el papel que había recibido”. Parece ser que éste, cuando lo leyó, le dio un susto de muerte al informarle de la cruel realidad: esto significa que nos echan de casa”. Continuando “si somos canarios y tenemos niños con suficiente puntuación, por qué le dan las casas a parejas homosexuales sin hijos y a extranjeros con mucho dinero, como hindúes, ó moros”. Intervino con irritación su esposa para recordarnos las injusticias recibidas con el baremo de opción a viviendas sociales, ya que en 1993 tenían 324 puntos y no les otorgaron vivienda alguna, mientras que otros “godos” con tan sólo 200 se las concedieron.

Exclamando ya fuera de sí “¡Ahora nos vuelven a machacar en la nueva baremación del 23 de Marzo de 1996! Nos bajan sin razón alguna a 207 puntos”.

El otro matrimonio formado por la otra hija Mari Pino y su esposo J. Antonio Medina tienen dos hijos. El trabajó de peón en trabajos eventuales durante tres o cuatro meses, lo paran y cobra un poco el paro, lo vuelven a llamar, y ¡otra vez al paro al igual que la gran masa de nativos! Con menos facilidad de palabras que José Manuel, pero con una mirada noble que tan frecuentemente veo, con mucho dolor, entre muchos paisanos, me dio su opinión:

“Los Canarios estamos marginados en el empleo por nuestra nobleza aporque no nos sabemos defender, ya que permitimos que el trabajo esté centralizado por españoles, y el poco que nos dejan, es el más humilde, aunque ahora siquiera estos puestos, ya que están copados por andaluces y gallegos” Aclarándome con un ejemplo concreto: "Estuve trabajando unos meses en un edificio grande junto a la fábrica de Aceites Racsa y a pesar que trabajábamos con gran profesionalidad, nos pararon a todos, porque cambió con un contratista peninsular que se trajo un centenar de españoles para esclavizarlos trabajando sábados y domingos”.

¿Dónde están los políticos canarios que no nos defienden de estos atropellos y a estos pobres diablos de tales condiciones infrahumanas?

Finalizando con un lamento, "A los Canarios nos están arrebatando hasta el aire que respiramos y estoy sintiendo que es un pecado ser canario".

Después de fotografiarles y al final de la entrevista invité a la familia a desayunar a la terraza del restaurante Los Girasoles en la cercana Playa de Las Canteras, mientras paseábamos el Sr. Arellano me recordó lo que para mí en estos momentos que estoy escribiendo este libro "Genocidio Canario” es la parte fundamental que pretendo compartan los lectores. “Según La Constitución Española todos somos iguales ante La Ley, con los mismos derechos y oportunidades para obtener un trabajo digno, vivienda y estudios sin desventaja”.

¿Cómo es posible que en este momento que nos alojamos en una zona turística donde todos parecen felices, especialmente los extranjeros, no podamos siquiera comprar un pan y encerrados en dos pequeñas habitaciones, para desconsuelo de los niños, que no los podemos sacar siquiera a la playa, por no poder comprarles al menos una golosina?

Ya desayunando me hizo una confidencia que le costó bastante, pues le desgarraba el corazón:

“En todo momento en la entrevista Vd. no ha visto a Ana, la hija que me está partiendo el corazón, la más inteligente y la que tenía de niña el más brillante futuro si no me hubiera traído la familia de Barcelona”. Mientras se le iba quebrando la voz y afloraba lágrimas en sus ojos, “En estos momentos tiene 30 años, está viviendo con un grupo de drogadictos en las Cuevas de Mata, la pobre infeliz está tan enganchada a la heroína y enferma, que no pesa más de 30 kilos. Estoy sintiendo que en cualquier momento me vengan a dar la fatal noticia de que ha muer­to, aunque tal vez no sé que es mejor para ella y descanse en paz”? (Paco Díaz, 1997).

Ahora bien, este tipo expolio no es privativo de este siglo, su practica esta documentada desde los inicios de la invasión y conquista de nuestro archipiélago por las hordas mercenarias europeas desde 1402, y se ha venido manteniendo en el transcurso del tiempo hasta nuestros día.

En los primeros tiempos de la invasión, los guanches fuimos desalojados de las cuevas, casas y auchones así como de sus santuarios y panteones, esta fueron entregadas a los invasores y colonos, unas veces conjuntamente con los lotes de tierras y otras sin ellas, en un principio fueron utilizadas como viviendas y posteriormente conforme los colonos iban construyendo sus casas, esta cuevas habitación  fueron reutilizadas como graneros, bodegas o corrales para ganados.

Alguna de estas cuevas habitación y santuarios han quedado registradas en la bibliografía colonial, entre ellas podemos citar: “Cueva de Guahedum, en La Gomera, morada de la Sacerdotisa Iballa, causa de una de las mayores masacres sufrida por el pueblo canario a manos de los colonizadores, posteriormente convertida en gañanía.

La isla Ecero (El Hierro) predominaban como habitat las construcciones de superficie, la documentación escrita, y las excavaciones arqueológicas, muestran lugares que tenían carácter sagrado en la isla. En el término de Bentayca, por la zona que llaman Los Santillos, existen dos roques que los dioses habitaban cuando bajaban del cielo. En el término Tacuitunta, donde decían Asteheyta, habitaba en una cueva Aranfaybo. Y otro lugar es El Julán, aquí existe un conjunto de ruinas que fueron utilizadas por los Bimbaches, donde hubo ritos de sacrificios, cuevas sepulcrales, concheros y se hicieron grabados rupestres.

En Titoreygatra (Lanzarote) la zona más poblada de era el valle de Zonzamas y la vega de Timanfaya, donde abundan “las casas honda”. También usan las escasas cuevas naturales así como cabañas pastoriles y casas de piedra seca.

En Erbania (Fuerteventura) se usan las “casas hondas” como en Lanzarote, aunque también hay casas que forman pequeños poblados, como el de la Atalayita en Pozo Negro. Se localizan algunas casas con restos de murallas que pueden tener un caracter defensivo o de delimitación del espacio, y unas pocas cuevas artificiales.

En Tamarant (Gran Canaria) hay una gran cantidad de hábitat en cuevas, tanto naturales como artificiales, y en la superficie. Como por ejemplo; El denominado Cenobio de Valeron (Agadires), Cueva de La Audiencia, Cueva de Las Estrellas, Los Santillos, Cueva Pintada de Galdar, hoy presta funciones de Museo etc.

Las Cuevas de Caballero, es un conjunto arqueológico integrado por doce cuevas artificiales y naturales transformadas, que se distribuyen a los largo de un andén orientado al sur, con hermosas vistas sobre el Bentayga y el valle de Tejeda. Cueva de los Candiles, ocupa un lugar de honor entre todos los yacimientos de Canarias lo ocupa la extraordinaria Cueva de los Candiles, situada en un impresionante acantilado conocido como Risco Chapí, entre los municipios de Tejeda y Artenara.

Normalmente hacían una gran entrada y, al lado de ésta, dos lavaderos. Encima de la puerta abrían una pequeña ventana por la cual entraba luz en todas las habitaciones de la casa. Los cuartos eran grandes o pequeños según sus familias y necesidades, y también hacían muchos nichos donde situar utensilios domésticos, agujeros de asideros o silos interiores.

La  isla Tamarant contaba con concentraciones realmente urbanas, las plantas de la viviendas pueden eran cruciformes, cuadradas, rectangulares, trapezoidales, ovales, circulares, semicirculares o incluso irregulares. Para mejorar su iluminación y aireación, construían ventanas o claraboyas.

Para la construcción de casas contaban con albañiles y carpinteros. Las paredes se realizaban seleccionando y trabajando piedras que diesen una cara regular, especialmente en cimientos y esquinas, para formar una cara externa y otra interna, rellenándose su interior con piedras pequeñas y tierra que acabarán constituyendo muros de aproximadamente 1-1,50 metros. Los techos se preparaban con listones de madera de tea, sabina o cedro, luego una capa de losas planas de pizarra y finalmente una capa de ramas vegetales.

En Chinech (Tenerife), ocuparon preferentemente las cuevas naturales de los márgenes de los barrancos, son notables; Cueva de Don Gaspar; Cueva de Las Paloma; Los Cabezasos, Cueva escavada de Los Reyes; Cueva de Achbinico, primer santuario de la Diosa Chaxiraxi (virgen de Candelaria) y primera parroquia católica del Valle de Güímar, también destacan los poblados de Punta Rasca y Las Cañadas.

Benahuare (La Palma), las Cuevas naturales eran las viviendas más extendidas en las Isla, debido a la abundancia de ellas en la orografía del terreno. 

Las más idóneas para su ocupación eran las que disponían en su entorno de una temperatura, vegetación y agua adecuadas. Es por ello por lo que, en general, se encontraban próximas a la costa, aunque también ocupaban cuevas de cotas superiores, sobre todo para aprovechar los pastos de montaña en verano.

Cuando la naturaleza del terreno lo permitía (zonas de tobas volcánicas), los awaritas excavaban sus propias cuevas, las cuales las encontramos de forma aislada o en concentraciones en zonas próximas a la costa. En las medianías abundan los poblados.

La Cueva de Belmaco en la actualidad acoge una de las estaciones arqueológicas más importantes, no sólo del Archipiélago, sino de todo el mundo, conformando uno de los vértices del triángulo de hallazgos arqueológicos en Canarias.

Los grabados rupestres de la Cueva de Belmaco fueron los primeras que se descubrieron en Canarias, hecho que ocurrió de forma casual, fruto de la visita de inspección realizada en 1752 por el entonces gobernador militar de La Palma, el criollo Domingo Van de Walle de Cervellón. Desde entonces, Belmaco se convirtió en un mito y una leyenda donde, según la tradición oral, vivieron los señores del cantón de Tigalate: Juguiro y Garehagua.

Ofrecen especial interés la cueva conocida como Tubo Volcánico de Todoque (Valle de Aridane), y la Cueva del Vidrio.

En fin, nada nuevo bajo la Sol de Canarias.

Febrero de 2013.

Fuentes consultadas

Paco Díaz

Genocidio Canario

ISBN.: 84-605-6356-1

Pags. 41-45.

Las Palmas de Gran Canaria

Archipiélago Canario, 1997.

El asentamiento

Revista Mundo Guanche

Nº 18 - Enero 2007
[ISSN 1886-2713]

Diario La Provincia de fecha  24 de julio de 2012.